si no me habla,
me siento en el umbral del olvido,
no se si existo,
no sé qué escribo,
no sé qué digo,
sí existe el tiempo,
el ayer, el ahora, el mañana,
la realidad,
si no me habla solo siento que hablo conmigo,
que es un delirio,
todo se torna nada,
caigo en la separatidad,
la soledad se apodera de la totalidad,
nada tiene sentido,
por qué el sentido es la respuesta que el otro me da,
y yo recibo,
que me obliga a repensar,
que fue lo que dije,
eso abre otros significantes,
a los significados vertidos,
que hacen que sienta que no estoy solo conmigo,
hablándome,
su respuesta es todo lo que necesito,
para saber,
que aún estoy en el mundo real,
y no en el imaginario,
si no me habla,
estoy perdido.
Gabriel Hereñú.
Psicólogo social. Psicoterapeuta existencial. Especialista en terapia de crisis.
…esa necesidad del vínculo para autopercibirme, ese mor hacia afuera q también es hacia adentro, esa necesidad de escuchar las palabras de quién transcurre en mí mente… corazón ❤️